marzo 17, 2009


Nacho Santos reflexionó sobre varios temas: el nuevo Racing, su experiencia en el futsal español y el llamado de su hermano Andrés a la Selección

«Patricio Knaudt será un dirigente sensacional»

Ignacio Santos (28) regresó a la Academia luego de haber pasado por la división de Plata de España y analizó estos tres grandes temas.
EL NUEVO RACING. "Aunque estos de la Copa Japan Motors sean partidos de pretemporada, duele mucho perder. Sobre todo porque para mí es un orgullo vestir esta camiseta, de la que toda mi familia es enferma. Considerando la calidad de jugadores que tenemos, estamos muy lejos de un rendimiento acorde a eso. Pero a trabajar tarde, recién nos conocemos y eso se siente en la cancha. Creo que habría que replantearse el hecho de salir a buscar tanto el partido en estas condiciones. Este plantel es muy experimentado y numeroso, eso a veces es un arma de doble filo. Pero depende de nosotros. Ya lo hablamos y a tiraremos todos para el mismo lado. El futsal de este club estaba muy desordenado, ni siquiera había materiales. Por eso, ahora tengo que sacarme el sombrero con Patricio Knaudt (el nuevo presidente de la actividad) que será un dirigente sensacional. Entre él, el cuerpo técnico y los jugadores trataremos de devolver al equipo al lugar que merece. Es difícil, porque acá un mal resultado en cancha de once repercute en todos los ámbitos, pero al menos haremos el intento.
SU PASO POR ESPAÑA. Viaje el año pasado a Cantabria, por estudio, y me contactaron con la gente del Castro Urdiales. Hice una prueba, gusté y quedé. Después, me costó mucho la adaptación. Es otro ritmo, más para mí que arranqué con el futsal de grande. Pero la experiencia fue espectacular. Aprendí un montón y me trataron de primera. Lo que pasa es que siempre tuve claro que no iba a vivir de esto y por eso volví. Diferente es el caso de mis hermanos, que están haciendo carrera".
SU HERMANO EN LA SELECCION. "Arrancamos los tres juntos en Arsenal, cuando empezó la disciplina. Los llevé sin saber de qué se trataba esto. Andrés, que ahora juega en Boca, fue pasito a pasito, comenzando por la sub 17, y verlo ahora en la mayor es un orgullo. El está muy contento y se merece lo que le está pasando. Es un fenómeno como jugador y como tipo (N. de la R: Nacho se emociona al halar del tema). Después está Gabriel, el menor, que todavía sigue en Arsenal. Lo más importante para un hermano mayor saber que lo poco que uno trató de inculcarle de chico, da sus frutos. A Andrés siempre le dije que se cuidara porque esto iba a ser cada vez más profesional, y lo cumplió al pie de la letra".