marzo 17, 2009


José Mandayo arregló su incorporación a Huracán. El arquero habló de eso, de su alejamiento de Boca, de su renuncia a la Selección, y dejó esta frase como deseo:

«Algún día me gustaría hablar con Larrañaga»

José Mandayo reapareció en el futsal local atajando para Huracán. Lo hizo en el amistoso frente a Caballito, y exhibió un nivel acorde a los muy buenos antecedentes que acumuló en sus pasos por Franja, Boca y River. "Estoy contento por haber vuelto a jugar en el país, y más todavía en Huracán. Hacía mucho que quería hacerlo con esta camiseta, es un honor, tenía una cuenta pendiente", manifestó Mandayo, quien estuvo dos temporadas en Italia y cuyo pase sigue perteneciendo a Boca.
"En el club se está armando un buen equipo, hay intenciones de hacer seriamente las cosas y de pelear el campeonato, si bien aún nos falta bastante trabajo", comentó el arquero. Y al respecto del breve paso que tuvo a fines del año pasado por San Lorenzo, sentenció: "Practiqué con el plantel pero me quedaba muy lejos. La verdad que no tenía tantas ganas. Además después arregló Gramuglia. Oscar Trama es un amigo, quedó todo bien con él, pero me vine a Huracán".
Sobre su experiencia en Italia resumió: "Fue excelente. Estuve en la A1 con el Nápoli y más adelante firmé para el Velletri de Fabián López, en la serie B. Estuvimos a punto de subir. Y cuando estaba por regresar al Nápoli no arreglé por temas laborales. Entonces volví al país, pero creo que en septiembre estaré otra vez en Nápoles".
Mandayo reconoció que su ida de Boca hacia el calcio -viajó sin autorización- resultó bastante incómoda: "Irme a Italia me pareció la mejor decisión. Quizás fue apresurada, pero era mi futuro. No me equivoqué ni tampoco estoy arrepentido". De todas formas, lamentó que eso le haya traído problemas con Fernando Larrañaga: "La relación no es la mejor pero yo lo aprecio mucho y por él estoy dónde estoy. Ahora no es el momento, pero quisiera volver a hablar con él algún día". Luego de haber actuado casi por una década en la Selección, Mandayo renunció a ella en 2007: "Estaba muy cansado, hacía ya un año que pensaba dejar. Me costaba entrenar ahí todos los días y en los viajes no la pasaba bien. Para estar por estar preferí dar un paso al costado, sentí que perdía el tiempo pese a que faltaba muy poco para el Mundial".
Por último, el guardavalla aseguró: "No voy a jugar contra Boca. Prometí que así sería aunque tuviera el pase en mi poder. Los dirigentes ya conocen mi decisión".